Joan Enric Soler y Jaume Juan Huguet han sido reconocidos como finalistas en la tercera edición de los premios 3digits, celebrados en la Universitat de les Illes Balears (UIB). Este galardón, impulsado por 3digits en colaboración con la Fundació Universitat-Empresa y la Escuela Politécnica Superior, premia la excelencia académica y el compromiso con la innovación tecnológica. En este artículo, descubrimos las historias de dos estudiantes que están programando su futuro con pasión, esfuerzo y visión.
Primeros pasos en la universidad: entre retos y descubrimientos
Para Joan Enric, el primer año en la universidad fue un punto de inflexión. “Pasé de aprender lo que enseñan en secundaria a adentrarme en un mundo donde puedo entender lo que más me fascinaba en la vida”, explica. Las asignaturas más desafiantes, como Cálculo y Álgebra, le obligaron a enfrentarse a conceptos abstractos, pero también le abrieron la puerta a una comprensión más profunda del lenguaje de las máquinas.
Jaume, por su parte, vivió su primer año como una etapa de grandes cambios. Se mudó por primera vez fuera de casa, compartió piso con amigos y se adaptó al ritmo de Palma. “Llegué con muchas ganas. Sabía que el ambiente sería muy distinto al del instituto. Podría conocer a gente con mis mismos intereses y aprender en profundidad sobre informática, algo que me apasiona desde pequeño”, cuenta.
Ambos coinciden en que estudiar lo que les gusta ha sido clave para disfrutar del proceso. “Aunque algunas asignaturas se hicieron pesadas, mis notas mejoraron sin dedicarle más tiempo. Supongo que estudiar algo que me encanta hizo todo más sencillo”, reflexiona Jaume.
Premios 3digits: una oportunidad para visibilizar el esfuerzo
Los premios 3digits nacen con el objetivo de reconocer el talento joven en el ámbito tecnológico. Para Joan Enric, presentarse fue una forma de “darse a conocer al mundo laboral”. Su candidatura se basó en su expediente académico, reflejo de un año de esfuerzo y dedicación.
Jaume también se animó al ver que un compañero de curso superior había ganado el año anterior. “Era una oportunidad sencilla para que se valorara el esfuerzo que había hecho”, comenta. Su expediente destaca especialmente en programación y matemática discreta, donde obtuvo matrícula de honor. “Matemática discreta era un área nueva para mí, pero me devolvió la pasión por las matemáticas”, añade.
Pasión por la informática: entre videojuegos, hardware y algoritmos
Ambos finalistas comparten una pasión por la informática que va más allá de lo académico. Joan Enric entró en la carrera con la idea de desarrollar videojuegos, pero pronto se sintió atraído por el hardware y el software de bajo nivel. “Me fascina lo que se ejecuta directamente en hardware específico”, afirma.
Jaume, en cambio, se siente cómodo explorando múltiples áreas. Le apasiona la programación, la inteligencia artificial, la teoría de la computación y la programación en ensamblador. “Me gusta profundizar en los aspectos fundamentales, porque a partir de ellos se crean sistemas complejos que hacen funcionar los dispositivos que usamos cada día”, explica.
Ambos coinciden en que la informática es un campo que permite unir creatividad y técnica. “Gracias a lo que he estudiado, he descubierto aspectos que me parecen muy interesantes y que antes ni conocía”, dice Jaume.
Mirando al futuro: especialización, proyectos y evolución personal
Joan Enric está en tercer curso y espera acabar la carrera el próximo año. “Este año empiezan las especializaciones y las optativas. Tengo muchas ganas de ver lo que me espera”, comenta con entusiasmo. Ser finalista de los premios 3digits ha sido para él un reconocimiento al esfuerzo. “Simboliza las ganas de aprender, el esfuerzo y la dedicación que he puesto en esta carrera”, afirma.
Jaume, por su parte, aún no ha decidido en qué especializarse. “Confío en seguir experimentando los distintos campos que me ofrece la carrera y descubrirlo próximamente”, dice. Además, tiene claro que quiere seguir desarrollando proyectos propios. “Es una forma de volcar mis conocimientos en algo tangible y de lo que me puedo sentir orgulloso”, añade.
Aunque no han tenido mentores directos, ambos han encontrado inspiración en figuras del mundo de los videojuegos. Joan Enric menciona a Masahiro Sakurai y Satoru Iwata como referentes. Jaume también destaca a Iwata y a Shigeru Miyamoto. “Demostraron cómo la informática y la creatividad se pueden unir para crear experiencias que marcan a millones de personas”, dice.
Además, Jaume valora el aprendizaje que ha obtenido de personas que comparten sus conocimientos por internet. “Mis familiares me han apoyado, aunque no estén metidos en este mundo”, comenta.
El futuro del sector: oportunidades y desafíos para los jóvenes
Ambos tienen una visión optimista sobre el futuro de la informática. Joan Enric cree que, aunque se habla mucho de cómo la inteligencia artificial podría quitar empleos, su papel será más bien el de asistente. “La verdadera creatividad y pasión deben salir de una persona humana”, afirma.
Jaume coincide en que el sector está en constante expansión. “La informática está presente en todas partes. Para los jóvenes, lo importante no son tanto los conocimientos previos, sino la capacidad de adaptarse a las nuevas tecnologías”, explica.
Las historias de Joan Enric y Jaume son un reflejo del talento que emerge cuando se combina pasión, esfuerzo y curiosidad. Finalistas de los premios 3digits, ambos representan una generación que no solo estudia informática, sino que la vive como una herramienta para transformar el mundo. En 3digits creemos en ese talento. En las personas que, como ellos, se atreven a explorar, a aprender y a crear. Porque el futuro de la tecnología no está solo en los algoritmos, sino en las mentes que los diseñan.